Aceituna, una, y si es buena, una docena

Solecito, terracita y vinito, refresco o cervecita y un cuenco de aceitunas. ¿Hay algo mejor a la hora del aperitivo? La comida ideal para calmar el apetito entre horas. Deliciosas y muy beneficiosas. Nos gustan tanto que te vamos a contar algunas de sus variedades, hablaremos de sus propiedades y desmontaremos algún que otro mito respecto a su consumo.

 

Variedades de aceitunas de mesa

 

Se considera aceituna de mesa al fruto de algunas variedades de olivo recolectado en estado de madurez. En España hay de muchos tipos, desde la manzanilla a la gordal, pasando por la picual, la hojiblanca o la verdial. Algunas de ellas sirven tanto para consumir en mesa como para hacer aceite. Según su proceso de elaboración y el momento de su recogida tenemos las siguientes variedades:

 

• Verdes. Son aceitunas recogidas en su punto justo de maduración.
• Color cambiante. Son aceitunas que se recogen antes de la maduración completa, sus tonalidades ocupan los tonos morados y rosáceos.
• Negras. Son aceitunas que son recogidas antes de su punto ideal de maduración y que obtienen su color negro tras un tratamiento determinado.

 

Se suelen consumir enteras con hueso, deshuesadas y rellenas con anchoas, pimientos, cebollas y mil cosas más, o tan populares como al estilo árabe, con vinagre y miel. ¡Riquísimas!

 

Propiedades de las aceitunas

 

Con hueso o sin él, rellenas o sin rellenar, ¿qué mas da? Lo importante es disfrutar sin abusar. Un puñadito diario de aceitunas es muy saludable. Son muy nutritivas, ricas en minerales y vitaminas. Aportan ácido oleico, para proteger a tu corazón de las cosas malas y son un potente antioxidante gracias a sus provitaminas A y E y a las vitaminas del grupo B que contienen. Ideales para personas con anemia, porque nos inyectan una buena cantidad de hierro, sobre todo las aceitunas negras. Además, nos dan mucha energía y nos cargan las pilas.

 

 

Los mitos de las aceitunas

 

“Aceituna, una, y si es buena una docena”. Así empieza esta entrada, con un refrán que habla de lo deliciosas e irresistibles que son, pese a que a veces pueden resultar indigestas. Si es que los sabios son sabios: “aceitunas, una o dos; y si tomas muchas válgate Dios”, que decían. Pues eso, son buenas, como hemos visto anteriormente, pero tampoco conviene abusar de ellas. Todo en su justa medida, ¿no? Según los expertos, siete aceitunas al día es la cantidad recomendada.

 

Mejor si se comen a media mañana para que nos aporten energía para el resto del día.

 

Otro mito habla de lo que engordan y de que hay que eliminarlas de las dietas de adelgazamiento. ¡Tranquilidad! Vale, sí, admitimos que tienen muchos aceites, pero son aceites esenciales como omega-3 y omega-6. En absoluto tienen tantas calorías como las pintan. Es más, es un alimento saciante, que ayuda a que mantengamos a raya el apetito y el peso gracias a su aporte de fibra.

 

También dicen que la relación entre dos personas irá fluida como la seda si a una de las dos partes le gustan las aceitunas y a la otra no. Nada, cuando llegues a casa dale unas aceitunas a tu pareja a ver qué pasa. Eso sí, sin abusar y a disfrutar de este fantástico alimento tan español.