LA PLAZA

Setas cultivarás y platos prepararás

¿Sabes cuáles son las especies de setas más cultivadas en el planeta? Aprendemos sobre el cultivo de este delicioso manjar y sus propiedades.

Cuando la tierra está aún caliente tras el verano y comienzan a llegar las primeras lluvias, allá por otoño, se dice que comienza la temporada de setas. Y es una gran verdad. Arranca la época de setas silvestres, deliciosas y con un sabor muy especial. ¿Quiere decir esto que no podemos disfrutar de este manjar durante el resto del año? ¡Por supuesto que no!

 

Hay que saber diferenciar bien las silvestres de las setas cultivadas.

 

Digamos que hay dos tipos de setas. Por un lado tenemos las saprófitas, que pueden alimentarse de materia orgánica muerta. Como puede ser el tronco o el tocón de un árbol. Y por otro las micorrizas, que crecen en simbiosis con la raíz de una planta que esté viva. Curioso, ¿no? Las micorrizas no pueden ser cultivadas, pero las del primer tipo sí, gracias al cultivo con materia orgánica muerta, que se denomina compost.

 

En España los cultivos se concentran en Albacete, Cuenca y La Rioja. Allí se cultivan unas 150 mil toneladas de setas cada año. De esa cantidad unas 135 toneladas corresponden al cultivo del champiñón, el resto va para otro tipo de setas. Es evidente que el champiñón es el rey del cultivo de setas, aunque después también sobresale la seta de ostra, con las tres cuartas partes de la producción. El resto de variedades son más exóticas.

 

Tipos de setas cultivadas

 

Obviando el champiñón común, de sobra conocido, vamos a profundizar en el resto de setas cultivadas para conocer algo más sobre sus usos y propiedades.

 

Seta de ostra

Como hemos citado anteriormente, es la más cultivada tras el champiñón común. Contiene muchas propiedades saludables para el sistema cardiovascular y está demostrado que comer este tipo de seta reduce la artritis y las cataratas. Además, aporta al organismo una gran cantidad de selenio, que es un potente antioxidante muy eficaz en la lucha contra algunos tipos de cánceres.

 

Shiitake

Viajamos a Asia para hablar de la shiitake. Allí es todo un elixir de vida y cuentan que tiene propiedades casi milagrosas. Es una de las principales fuentes de proteínas en la cultura oriental, donde la usan para mejorar la circulación de la sangre, hacer más fuerte el sistema inmunológico y disminuir el colesterol malo.

 

Seta de cardo

Tan parecida a la seta de ostra que los no expertos no son capaces de distinguirlas a simple vista. Es un tipo de seta muy preciado por su tipo de carne. Un tejido consistente y firme. Rica en vitaminas B2 y B3 y fuente de potasio y yodo. Procede de Corea y se cultiva en La Rioja.

 

Pie azul

Su inconfundible color azulado en el tronco la hace muy atractiva. Una seta que conviene cocinar mucho, ya que en crudo es indigesta. Remedio contra bacterias, aporta un exquisito aroma afrutado a tus recetas y tiene un característico sabor dulzón.

 

Melena de león

Cerramos con uno de los tipos más curiosos de setas. También es conocida como pom pom, seta erizo o barba de anciano. Sobre todo ha sido utilizada desde tiempos inmemoriales en la cultura oriental como medicina. Dicen que es un fantástico regenerador neuronal y que funciona muy bien contra la demencia. Al cocinarlo su textura se asemeja a la del marisco.

 

Nunca te acostarás sin saber una cosa más. En este artículo hemos aprendido mucho sobre setas cultivadas. Qué lujo poder disfrutarlas durante todo el año y, además, no pueden ser más sanas. ¿Eres setero? Pues date un lujo y ponte ya el gorro de cocinero.