LA PLAZA

Qué cerveza tomas y te diré cómo eres

¿Sabrías decir cuántas variedades de cerveza existen en el planeta? Nosotros tampoco. Hay una cerveza por cada cervecero. ¿Quieres aprender sobre algunos de sus tipos?

Cuentan que en el 10000 antes de Cristo ya había una bebida similar a la cerveza. Un dorado líquido que ha conquistado el paladar de millones de personas en todo el mundo. Aunque dicen que hay prácticamente tantas cervezas como cerveceros en el planeta, la realidad es que no existen muchos tipos como tal. No obstante, la cantidad de factores que intervienen en la fabricación de esta bebida dan lugar a sabores casi infinitos.

 

La forma más fácil de clasificar las cervezas es hacerlo en función de su fermentación. Así, tenemos los siguientes tipos:

 

Cervezas de baja fermentación

 

Lager

 

Son las más populares del mundo. Rubias, doradas, tostadas e incluso negras. Esta tipología de cervezas recoge su nombre del término alemán lagern, que significa “guardar”. Estamos ante una elaboración bastante nueva, ya que su origen data solo de mediados del siglo XIX. Aunque siglos antes los cerveceros de Baviera y Bohemia se habían dado cuenta de que guardando la cerveza en cuevas muy frías la conservaban durante todo un verano, fecha en la que no podían fabricarla por las altas temperaturas.

 

Este tipo de cerveza se consigue haciendo que la levadura fermente poco a poco a baja temperatura, dejándola madurar en frío en torno a cero grados centígrados entre dos y seis meses. El tiempo de maduración junto al tipo de malta, lúpulo utilizado y otros factores hacen que existan distintos tipos de lager.

 

  • Pilsen. La más consumida, proviene de la región checa de Pilsen. Es muy ligera y refrescante.
  • Viena. De color rojizo y con toques dulzones.
  • Múnich. Apreciado sabor a malta y de color oscuro.
  • Otras. Ahumadas, negras, bock, de trigo, etc.

 

Cervezas de alta fermentación

 

Ale

 

Término inglés que se utiliza para describir a las cervezas en las que sus levaduras fermentan a altas temperaturas. La fermentación dura unos tres o cuatro días a una temperatura de 25 grados centígrados. Posteriormente se suele dejar reposar otras dos semanas fermentando y madurando en barrica o en botella.

 

Aunque podamos pensar que el color es indicativo de que estamos ante una Ale en lugar de una Lager, nada de eso. Puede tener diversas tonalidades, más o menos amargor y más o menos graduación de alcohol. ¿De qué de depende? Pues al igual que en las Lager, del tipo de maltas y lúpulos utilizados, además de la maduración que haya tenido. Así, tenemos algunos de estos tipos:

 

  • Trapenses. Elaboradas en monasterios trapenses.
  • De abadía. Realizada por monjes.
  • Kölsch. Una seña de identidad en la ciudad alemana de Colonia.
  • Indian Pale Ale. Envejecida para tener más tiempo de conservación.
  • Pale Ale. Pálida y con menos lúpulo.

 

Stout

 

Puede ser una cerveza tanto seca como dulce. Su sabor es amargo y ácido y su color negro.

 

Cervezas de fermentación especial

 

Llamamos así a las cervezas que usan levaduras especiales, llamadas salvajes. Son conocidas también como cervezas de fermentación espontánea. Entre ellas destacan las Lambic, que tienen poco gas, las Gueze y las Faro.

 

Seguro que después de leer este artículo te han entrado ganas de tomarte una buena cerveza. No es para menos. ¡Brindemos por los buenos productos!