Palometa, rica y coqueta

Pescador, echa la caña al mar y a ver qué encontrarás. En este artículo pescamos palometa, aunque algunos la conocen como japuta. Una especie que estamos acostumbrados a ver en nuestros platos con un delicioso sabor ahumado y un rico color anaranjado. ¿Te suena? Claro, se asemeja al salmón ahumado. ¡Deliciosa! Sin embargo, la palometa es mucho más y ahora te vamos a contar sus propiedades, curiosidades y algunos usos en la cocina, más allá de su uso con humo.

 

Por norma general, encontramos a la palometa en aguas del océano Atlántico, del Índico y del sur del Pacífico. Aunque también en algunas zonas del mar Mediterráneo. Se consume durante todo el año, aunque en los meses de primavera hay menos ejemplares y su precio aumenta. Vive a grandes profundidades, de forma habitual entre los 100 y los 400 metros, aunque también baja a los 900. Cuando se aproxima a la costa para reproducirse es su momento de mejor captura.

 

Propiedades de la palometa

 

Sabemos que es sano comer pescado y mucho más si es pescado azul, ¿verdad? A la palometa podríamos considerarla como una especie de pescado azul por su contenido en grasa, similar al del salmón. Entre sus propiedades destacadas nos encontramos con su aporte de proteínas de alto valor biológico, mayor que en otros alimentos. También nos ofrece un buen surtido de minerales y vitaminas. Por ejemplo la vitamina B12, presente en grandes cantidades, superando incluso la que pueden tener los huevos y la carne. Esta vitamina es importante para la maduración de los glóbulos rojos y para mantener en buen estado el funcionamiento de las neuronas.

 

Variedades de palometa

 

La palometa adquiere muchos nombres en distintos puntos del planeta, debido a que existen diversas variedades muy similares entre sí. ¿Las conoces?

 

• Palometa común
• Palometa pintada o pez mantequilla americano.
• Palometa plateada o argentina.
• Palometa del pacífico.
• Palometa roja o alfonsino.

 

La palometa en la cocina

 

¿Quién no ha comido alguna vez palometa ahumada? Para esta técnica de cocinado se suele utilizar la palometa roja. Pero hay más opciones. Por ejemplo, en Andalucía es común consumirla en adobo y frita, la conocida japuta en adobo. En el norte es fácil encontrarla a la sidra, con cebollitas y patatas. Y no puede faltar la receta de palometa Juana, que incluye una guarnición de tomatito, cebolla, laurel y pimiento choricero.

 

Se puede encontrar fresca en el mercado, en conserva o ahumada. Es conveniente eliminar sus escamas cuando vamos a cocinarla. Así haremos que tenga una textura más delicada y sea más fácil de digerir. Tiene un sabor que combina francamente bien con otros alimentos. Especialmente recomendado unirla con cebolla y tomate. Si la vas a cocinar para niños pequeños, elimina antes la piel, por su consistencia dura. Es sencillo ir metiendo la palometa en la dieta si la utilizamos como ingrediente de una paella, en albóndigas o incluso en un platito de pasta. Las brochetas con marisco y frutas tropicales son también una combinación espectacular con palometa.

 

¡Qué fácil es comer bien! Un poco de ejercicio y dieta equilibrada y variada es larga vida asegurada. Te dejamos, que se nos enfría el emparedado de palometa ahumada con quesito fresco. ¡Ñam!