LA PLAZA

Caliente, rápido, sano: wok

Tan conocido como el arroz tres delicias, los rollitos primavera o el cerdo agridulce. De las cocinas chinas ha llegado el wok y lo ha hecho para quedarse.

Seguro que en alguna ocasión has visto en la tele o en algún restaurante esos cocineros asiáticos con sartenes repletas de fuego dando rítmicos movimientos a los alimentos en su interior. Bueno, no tienes que ser asiática para poder hacerlo y mucho menos tener un premio gastronómico. Tan solo es necesario que tengas un utensilio en tu cocina, el wok. Es sin duda una de las reinas entre las sartenes, cazos y cazuelas. Llegó de China y ahora no son pocos los que aprovechan sus propiedades para cocinar deliciosas recetas.

 

¿Qué sabes sobre el wok?

 

Es originario de china, de la cocina cantonesa, y su nombre en chino mandarín es kuo. Se trata de una sartén grande y profunda. Ligera y con forma redonda. Tiene aproximadamente unos 30 centímetros de diámetro y se fabrica en acero, hierro o incluso aluminio. Sus paredes curvas hacen que los alimentos no se queden pegados en las paredes. El calor se genera en la base y se distribuye gradualmente por toda la superficie. Los ingredientes se cocinan con poco aceite y el recipiente debe estar muy caliente, una técnica que los chinos denominan chao o chow.

 

Sus ventajas son numerosas. Ahorras en combustible, ya que su forma hace que el calor se distribuya intensamente por todas las zonas del wok. Tampoco es necesario utilizar mucho aceite. Con solo un poco tus recetas quedarán excelentes. Seguro que con una sartén normal tendrías que utilizar más cantidad para el mismo resultado. Por último, y quizá lo más importante, ahorras en tiempo.

 

Cocinar con wok es cocinar con rapidez.

 

Conocemos un poco de su origen y algunas de sus ventajas. ¿Qué tal si te damos una serie de consejos para que no se te resista la cocina con este utensilio? Atento, toma papel y lápiz.

 

  • Prepara con tiempo los alimentos que vas a cocinar. Tenlos todos limpios y troceados, a ser posible con el mismo tamaño.
  • Sigue unl orden a la hora de echar los alimentos al wok. Las carnes y mariscos deben ir primero (retira al terminar). Los ajos, cebolla y similares, después. Por último, los vegetales en orden de dureza y la salsa como punto final.
  • Calienta el wok hasta que humee. Añade aceite, distribuye por las paredes y espera a que vuelva a humear. ¡Listo para usar!
  • No olvides el movimiento. Utiliza una espátula de madera o silicona y dale vidilla al wok salteando.
  • No llenes demasiado el wok o bajarás la temperatura.
  • Cocina a fuego medio y al final dale un toque fuerte de calor para buscar texturas crujientes.
  • Los expertos recomiendan no lavarlo con detergente. Para mantenerlo en buen estado, lo mejor es que al acabar de utilizarlo lo limpies aún en caliente con un poco de agua y un cepillo. Cuando esté limpio, pásale un papel con un poco de aceite por toda la superficie.

 

El movimiento que se utiliza para cocinar con un wok se denomina wok hei. ¿Estás preparado para ser un auténtico experto en este tipo de cocina? Vamos, arriésgate y elabora una suculenta receta. Eso sí, no te olvides de nuestros consejitos.