LA PLAZA

Limpia la cocina, mira cómo brilla

Horno, encimera, campana y demás utensilios. Que no se te escape nada. ¡Tu cocina como los chorros del oro!

Sabemos que hay pocas cosas tan aburridas como limpiar una cocina. Es posible que encuentres cualquier excusa para dejar esto para el final de tu rutina. Sin embargo, ¿acaso no te produce una sensación de placer irresistible comprobar que todo está limpio y reluciente? ¡Cómo huele! Vamos a darte unos consejitos para que tu cocina quede como nueva cada vez que la uses.

 

¿Quién dijo miedo? Hoy toca limpieza.

 

Horno

Es uno de los aparatos que nos dan más quebraderos de cabeza a la hora de limpiarlos. Hay un truco muy sencillo para que lo limpies en un periquete. Solo tienes que hacer una masa con bicarbonato de sodio y agua. Extiende la masa por el horno –cuidado con no tocar las zonas metálicas exteriores y las resistencias– y deja que repose durante la noche. Al día siguiente basta con utilizar una espátula para eliminar la crema sólida y enjuagar con agua.

                                                                                              

Campana extractora

Nos quita los malos humos, pero se impregna de mucha grasa. Acumula mucha suciedad y hacer una buena limpieza en esta zona es fundamental. Las campanas de acero, así como otros utensilios de este material, se limpian con ginebra. Sí, sí, con ginebra. Un pañito impregnado en ginebra es mano de santo. Sin tónica, ¿eh?

 

Encimera

Esta parte de la cocina es la que soporta más el paso del tiempo. Se ensucia mucho y debe estar siempre impoluta para preparar deliciosas recetas. Existen muchos productos para ayudarte en tu tarea dependiendo del material del que esté hecha tu encimera. Eso sí, para el mármol no hay nada mejor que mezclar un vaso de alcohol de 70 grados con el jugo de un limón y agua calentita. Te vas a tener que poner gafas de sol del brillo que desprenderá.

 

Muebles

Para esto es útil un limpiador casero. ¿Cómo? Pues preparando una solución a base de una taza de agua, media de vinagre y otra media de vodka. Si le añades unas gotitas de aceite de eucalipto habrás conseguido un potente desinfectante. Te aseguramos que las manchas de grasa se irán corriendo en cuanto vean el paño.

 

Fregadero

Es la puerta de salida de muchos desperdicios y se atasca con facilidad. Para tenerlo siempre a punto echa cuatro cucharadas de bicarbonato de sodio por el desagüe y añade una mezcla de agua caliente con vinagre. Espera que todo haga efecto unos cinco minutos y luego deja que corra el agua. ¡Limpio en un momento y económico! Si además quieres que huela bien, te recomendamos congelar cubitos de hielo con vinagre y piel de limón y echar un par de ellos por el sumidero cada dos semanas.

 

Lavavajillas

Muchos creen que no es necesario, pero es un electrodoméstico que debemos limpiar a menudo. ¿Por qué? Porque hay muchos microorganismos que es recomendable evitar. El remedio es tan sencillo como eficaz. Vierte media taza de vinagre blanco y pon el lavavajillas con una temperatura alta. Parecerá magia.

 

Ya no tienes excusas para tener como los chorros del oro tu cocina. Vas a ser la envidia del vecindario. ¿Quién dijo que no se podía estrenar cocina cada día?