LA PLAZA

Las naranjas con ombligo

¿Sabías que las naranjas son de las frutas más consumidas en todo el planeta? Más de 300 variedades y nos hemos centrado en una, la navel. ¿Qué la hace tan especial?

Allá por 1820, un pequeño huerto de Bahía, en Brasil, disfrutaba de unas naranjas tan dulces como exquisitas. Su forma tenía una curiosidad, ya que en el interior de cada naranja nacía un pequeño fruto que se asemejaba a un ombligo. Parece ser que tampoco tuvieron que pensar demasiado sus descubridores para ponerles un nombre, así que les llamaron naranjas ombligo o naranjas navel, término inglés que significa ombligo. Su consumo empezó a ser familiar a partir de 1870, cuando el Departamento de Agricultura de Estados Unidos se llevó esta variedad a Washington DC para distribuirla por todo el país.

 

Estás ante una de las variedades de naranja más conocidas del planeta. ¿Su secreto? Además de su gran sabor, destaca la facilidad para ser pelada y que no suele tener pipas. Va muy bien para zumos y también para consumo en fresco y en repostería. ¡Deliciosa!

 

Tipos de naranjas navel

 

En España, los principales productores de estas naranjas se sitúan en la zona del mar Mediterráneo. Son muchos los tipos de estos cítricos, pero podríamos destacar algunos como estos:

 

  • Washington. La original, que toma su nombre por ese cargamento que se llevaron los estadounidenses para su país en 1870. Su piel es rugosita y de color ligeramente amarillenta. Su sabor es muy equilibrado entre el dulce y el ácido.
  • Navel Barnfield. Las que se cultivan en Valencia son exquisitas. Tienen un color anaranjado fuerte y contienen mucho zumo. Su recolecta empieza a mediados de marzo y termina a finales de mayo.
  • Navelinas. Al contrario que el resto, su forma no suele ser redondeada, es más ovalada. A veces cuesta trabajo distinguir su ombligo y se pelan muy bien. Entre mediados de octubre y finales de febrero se recolectan.
  • Navelate. Desde finales de febrero hasta abril tenemos esta variedad de navel. Su piel fina hace que sea difícil de pelar. Fantástica para zumos.
  • Lane Late. Una de las más comercializadas. Se mantiene en buenas condiciones durante más tiempo y su sabor es excelente. También tiene la piel fina, como las navelinas, y un ombligo pequeño.

 

Consejos para comprar naranjas

 

Cuando vayas a La Plaza de DIA a comprar unos kilitos de naranjas, es útil que sigas algunos consejos para disfrutar más del producto.

 

  1. Piel lisa. Una piel arrugada es un síntoma de naranja vieja. Evita piezas con rugosidades y busca las lisas. Si tienen mucho brillo, recela. Los brillos siempre son conseguidos de forma artificial.
  2. Color. La coloración de las naranjas depende en parte de la variedad que estés comprando. No siempre los más llamativos son los mejores, por mucho que atraigan nuestra atención. No te preocupes si notas zonas con un color más fuerte que en otras, esto ocurre cuando ha recibido más sol por esa parte.
  3. El tamaño importa. Hay personas que piensan que cuanto más grande, más buena está la fruta. En el caso de las naranjas, no importa tanto el tamaño como el peso. Si son enormes, es posible que contengan mucha piel y poca pulpa. El truco es sostenerlas en la mano y ver si pesan lo suficiente como para que estén cargadas de delicioso zumo.
  4. Busca el rabito. Las naranjas con tallo suelen ser frescas, ya que estos rabitos muestran que han sido recolectadas recientemente. No lo dudes y escoge estas.

 

Conservación en casa

 

Si ya has comprado unas buenas naranjas, te gustará saber que puedes alargar su vida siguiendo unos trucos básicos. Les sientan mal el calor y la humedad. Busca un sitio fresco y seco para su conservación. Hay quien las coloca sobre papel de periódico esparcidas para que el aire se mueva entre ellas. Finalmente, tienes que apartarlas de otras frutas que sigan madurando cuando no estén en el árbol, como es el caso de manzanas y plátanos, ya que esto puede hacer que se pongan malas antes de tiempo.

 

Una cajita de naranjas navel o naranjas ombligo siempre contigo. De temporada, las que más agradan. ¡Ricas, ricas!