LA PLAZA

El plato con almejas nadie lo deja

Uno de los platos más codiciados de las cocinas de medio mundo. Las almejas han formado parte de la dieta de los seres humanos durante siglos.

¿Sabías que el animal más viejo del mundo vivió 507 años? ¿Adivinas qué animal era? ¡Una almeja! Procedía de Islandia, nació en 1499 y murió en 2006. Un dato impresionante sobre el animal del que vamos a hablar en este post. En España, concretamente en Galicia, conviven varios tipos de almejas, como la de Carril, una de las mejores del mundo. Nos hemos propuesto ver algunas de las variedades más conocidas, contaros alguna cosita sobre sus propiedades y terminar con un consejo sobre su preparación.

 

Tipos de almejas

 

La variedades de almejas son muchas. ¡Hay miles! No obstante, queremos centrarnos en tres tipos autóctonos de Galicia. Aprendamos un poco más sobre ellas.

 

  1. Almeja fina. Es el orgullo de Carril, un municipio de Vilagarcía de Arousa, en Pontevedra. Es una de las más apreciadas en toda el planeta por su extraordinario sabor. El secreto es que es una de las especies de almejas que más tiempo permanecen vivas fuera del agua, proporcionándoles ese exquisito gusto. Se distinguen fácilmente por su concha, ya que presenta unos radios muy marcados formando cuadraditos con otras líneas concéntricas.
  2. Almeja babosa. De calidad parecida a la fina, aguanta menos fuera del agua. Es una almeja más delicada. Procede generalmente de Illa de Arousa. Se distingue por sus manchas irregulares en la concha.
  3. Almeja rubia. También conocida como listada, adquiere colores rojizos y morados. Tiene un gran tamaño, pudiendo alcanzar hasta los seis centímetros de longitud. Su sabor es muy intenso, se utiliza mucho en guisos.

 

¿Es sano comer almejas? ¡Por supuesto! Sano no, sanísimo. Vamos a destacar algunas de sus muchas propiedades. Por ejemplo, ¿sabías que las almejas contienen más hierro que un chuletón de ternera? Para que te hagas una idea, unas ocho almejas de un tamaño más bien pequeño contienen 25 miligramos de hierro. Lo recomendable al día es entre 8 y 18 miligramos para los adultos. Así, es una buena forma de luchar contra la falta de hierro o la anemia. Al rico Omega 3. Hablamos de esos ácidos grasos que mantienen sano tu corazón y mejoran el rendimiento de tu cerebro. Unos cien gramos de almejas contienen 150 miligramos de Omega 3. Son también muy nutritivas, con muy poca grasa y muchas proteínas de calidad. Repasemos otros beneficios de comer este manjar:

 

  • Mejora la memoria gracias a su contenido en vitamina B12.
  • Reduce el colesterol malo en la sangre.
  • Mantiene tus huesos fuertes con una buena dosis de calcio y yodo.
  • Es afrodisíaco. Mejora el apetito sexual.

 

¿Cómo limpiar almejas?

 

No nos digas que no te han entrado ganas de comerte un buen platito de almejas. Qué ricas. Antes de prepararlas, debes saber cómo limpiarlas. Lo cierto es que hoy en día las que venden en tu plaza de abasto seguramente estén bastante limpias. Sin embargo, por muy limpias que te las vendan es normal que tengan restos de arena en su interior. Su limpieza se realiza en un proceso muy sencillo y rápido. Desecha las que tengan la concha rota o estén abiertas. Prepara un cuenco profundo con agua y una cucharada sal e introduce en su interior las almejas. Lo ideal es que estén unas dos horas en remojo, por lo que si hace mucho calor es mejor dejarlas en la nevera. Si no tienes tanto tiempo, a partir de los 30 minutos suelen estar bien limpitas. Cuando se hayan purgado bien, retira con las manos las almejas y pásalas por un colador bajo un chorro de agua fría. ¡Listas para cocer y cocinar!

 

Comer almejas todo el mundo aconseja. Al vapor, a la marinera o crudas en sashimi. ¡Ains, cómo nos vamos a poner de marisco! Al comprar, que los alimentos sean frescos y de temporada, la comida que más agrada.