LA PLAZA

Echándole el freno a la anemia

Combatimos la anemia con una dieta equilibrada y saludable. No te pierdas nuestros consejos sobre cómo luchar contra este trastorno.

Si tienes problemas de concentración, te notas más cansado de la cuenta, tienes dolores de cabeza a menudo o incluso te mareas, puede que sufras anemia. No tienes que preocuparte en exceso, ya que aproximadamente el 24,8 por ciento de la población del planeta ha sufrido o sufre este trastorno. Es decir, unos 1.620 millones de personas. Afecta sobre todo a niños y mujeres no embarazadas y se soluciona con relativa facilidad con una dieta equilibrada y sana.

 

¿Qué es la anemia? No es más que tener una cantidad insuficiente de glóbulos rojos sanos en tu sangre.

 

Estos son los encargados de transportar el oxígeno a los tejidos y los órganos. Aunque hay muchos tipos de anemia, nosotros queremos centrarnos en las que tienen su origen en la nutrición, que son la anemia por carencia de hierro, de ácido fólico o de vitamina B12. Con una mejora en los hábitos alimenticios, lo más habitual es que se solucione el problema sin necesidad de acudir a fármacos.

 

La absorción del hierro

 

  • Tener claro el origen del hierro. Si procede de los animales (carnes rojas, pescado, yema de huevo, etc), se denomina hemo. Y si es vegetal (verdura, frutas y legumbres), no hemo. Esto influye en la mejor absorción del hierro por parte de nuestro organismo. El hemo se absorbe mucho mejor que el no hemo.

 

  • Hay que tener en cuenta que las legumbres contienen ácido fítico, que es una sustancia que dificulta la absorción del hierro. Por eso, aunque las lentejas tengan mucho hierro, a nuestro organismo solo llega una pequeña parte.

 

  • Aprende a combinar bien los alimentos. La vitamina C es fantástica para que nuestro cuerpo tome más hierro de otros productos.

 

  • Evita el café, el vino, el té y el vinagre en grandes cantidades. Contienen taninos, que también van en contra de la absorción de hierro.

 

  • De postre, apuesta por los cítricos frescos o zumos recién exprimidos. Los kiwis, naranjas o mandarinas son una excelente opción.

 

  • Toma cereales integrales en lugar de los refinados. Poseen más hierro y vitamina B12.

 

Alimentos ricos en hierro

 

¿Qué tal si te haces una lista con los alimentos que tienen mayor concentración de hierro? Apunta algunos, porque son de lo más curiosos. Los números hacen referencia a los miligramos de hierro que contienen por cada 100 gramos de producto.

 

  • Tomillo (123,6)
  • Pan blanco frito (89,2)
  • Comino (66,35)
  • Orégano seco (44)
  • Albahaca (42)
  • Canela en polvo (38,1)
  • Almejas (25,6)
  • Cereales de maíz y trigo (24)
  • Pichón asado (20)
  • Huevos de gallina (13,8)

 

Combinando alimentos

 

En la combinación de alimentos puede estar la clave para aprovechar al máximo todos los nutrientes que ingerimos. Lo ideal es facilitarle las cosas a tu organismo, para que pueda luchar contra la anemia y puedas sentirte mejor. Prueba la pasta integral con berberechos o mejillones, las almejas en salsita marinera, un rico carpaccio de buey con una vinagreta de limón, pescadilla con endibias o una deliciosa macedonia de frutas.

 

En el desayuno introduce el pan con jamón de york, pavo o jamón serrano junto a una pieza de fruta o un zumito. A media mañana prueba con queso desnatado o un yogur desnatado con cereales. Para comer apuesta por las carnes rojas y combínalas con algún cereal integral. De merienda, un yogur líquido o pan quesito y membrillo. Finalmente, para cenar, una ensalada de tomate o un huevo.

 

Ya no tienes excusa para mejorar tu alimentación y prepararte para absorber los nutrientes que necesitas. Sano no, sanísimo. Así te queremos.